Mendrisio, en el Ticino, es una bonita ciudad medieval en la que la Semana Santa se celebra con procesiones que conmemoran la Pasión de Jesús de Nazareth y que tienen lugar en un ambiente de recogimiento y devoción. La tradición la inició la orden religiosa de los Siervos de María que proveniente de España, se instaló en el Tesino en 1451.
El Jueves Santo se celebra un Vía Crucis que termina con la Crucifixión y el Viernes Santo se conmemora la sepultura de Cristo. Estas dos procesiones desfilan todos los años por las estrechas calles de la ciudad alumbrada con los 'transparenti', unos lienzos de gran tamaño, pintados con escenas de la Pasión e iluminados, que los habitantes de Mendrisio colocan en sus calles y ventanas.
Los 'transparenti' datan del siglo XVII y la técnica utilizada para su elaboración sigue siendo un secreto. Sólo se sabe que los artesanos, algunos artistas reconocidos, impregnaban las telas de cera y trementina y que había una elaborada técnica para realizar los dibujos con pigmentos, logrando un efecto muy sugestivo a la luz de las velas, algo que a día de hoy sigue creando una atmosfera muy especial.