Sobre el saliente de una roca, junto a la estación del funicular que sube al Monte Tamaro, en el Ticino, hay un sendero que conduce al cielo y a una capilla, Santa Maria degli Angeli, que pese a ser de hormigón, tiene un aspecto muy ligero. Terminó de erigirse en 1994 y fue consagrada el 1 de septiembre de 1996.La idea de construir esta capilla, casi tocando el cielo, fue de Egidio Cattaneo, quien encargó el proyecto al célebre arquitecto suizo Mario Botta. Éste abrió nuevos caminos arquitectónicos sobre el Alpe Foppa y estableció el punto de partida de una ruta que va desde este lugar, a 1.961 metros de altitud, hasta el Monte Lema (1.624 metros sobre el nivel del mar). La decoración interior de la capilla es obra del italiano Enzo Cucchi.
La ruta que nace en Santa Maria degli Angeli discurre desde el Lago Maggiore hasta los valles de Centovalli, Maggiatal y Verzascatal, con impresionantes vistas sobre los valles alpinos alrededor de Lugano.
2 comentarios:
Me lo apunto para mi próxima visita a esos lares...parece precioso, desde luego.
Un beso,
Es bonito ¿verdad? No enontré una buena foto del interior que también merece la pena.
Un beso,
T
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