Bruno Ganz es, sin lugar a dudas, un gran actor y en la actualidad el más importante de los actores suizos. Nació en Zürich en 1941 y allí inició sus estudios de teatro, concretamente en el Bühnestudio. En 1962 se trasladó a Alemania, donde ha desarrollado la mayor parte de su dilatada carrera y por eso, no pocas reseñas lo señalan como alemán. En 1967 conoció al director Peter Stein, con quien fundó en Berlín la compañía de teatro Schaubuehne, donde coincidió con otros grandes de la escena centroeuropea.
Su primer gran éxito le llegó en 1972 cuando participó en el estreno mundial de la obra del austriaco Thomas Bernhard, 'Der Ignorant und der Wahnsinnige', en el Festival de Salzburgo, por cuya interpretación la revista especializada Theater Heute le concedió el premio al Actor más Destacado del Año.
Su carrera en el cine no pudo tener un inicio más fulgurante. Debutó de la mano del director francés Éric Rohmer en La Marquesa de O, película que recibió el Premio del Jurado en el Festival Internacional de Cannes y que lo convirtió en uno de los actores europeos más prestigiosos.
Ganz, destacado políglota capaz de trabajar en varios idiomas, siempre ha sido fiel al llamado cine de autor y ha trabajado con importantes realizadores como Theodoros Angelopulos, Werner Herzog, Alain Tanner o Wim Wenders, con quien rodó 'Cielo sobre Berlín', la historia de un ángel que renuncia a la inmortalidad para conocer la experiencia humana y mortal al enamorarse de una trapecista. Una película que tuvo su remake hollywoodiense en una empalagosa película protagonizada por Meg Ryan y Nicolas Cage que también fue dirigida por Wenders.
En los últimos años se ha hecho famoso por interpretar a Hitler, durante los últimos días de su vida, en la película 'El Hundimiento', dirigida por Oliver Hirschbiegel.
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viernes, mayo 8
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3 comentarios:
Ganz actúa también en una preciosa película: Pan y tulipanes, de Silvio Soldini, con una maravillosa Licia Maglietta. Y, además de un magnífico actor, al que se le nota a la legua que viene del mundo del teatro, parece una persona adorable.
Por cierto, Meg Ryan ha debido andar en todos los remake infumables que se perpetraron en Hollywood... El que más me dolió: Tienes un email, tontería que dicen basada en una de las joyas más divertidas de la historia del cine: El bazar de las sorpresas, del esta vez sí alemán Ernst Lubitsch.
Un beso.
Ésa no la conozco, últimamente voy al cine bastante menos de lo que sería deseable.
Por cierto, el otro día no lo tenía confirmado pero Bruno Ganz también tuvo un pequeño papel en el remake americano de 'Cielo sobre Berlín'. Nunca he podido entender como Wenders se prestó a eso.
Lo mismo el vil metal tuvo algo que ver...
Un beso.
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