La Wasserkirche de Zürich es un edificio del gótico tardío que data de finales del siglo XV y que fue erigida en el lugar en el que la leyenda dice que fueron ejecutados Felix y Regula, los dos patronos de la ciudad. Fue cerrada al culto durante varios siglos como consecuencia de la reforma protestante y en ella se instaló una biblioteca.
Desde 1933, su principal atractivo son unas vidrieras de Augusto Giacometti, tío del famosísimo escultor, que en el vitral central recoge escenas de la vida de Cristo mientras que en los laterales se representan escenas de la vida de un hombre corriente desde su nacimiento hasta la muerte, en una curiosa serie que incluye desde el servicio militar a la luna de miel y que bien merecen una visita.
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